LA CLAVE: Temperley no se desesperó y al final tuvo su premio.

CHACARITA JUNIORS: Todo lo bueno nacía de los pies de Luciano Nieto. A los 11 minutos, un tiro libre de éste fue a la cabeza de Centurión y la pelota se perdió al lado del palo derecho de Crivelli. En otra, le puso un pase a Alexis Vega que metió un centro que se fue cerrando y pegó en el travesaño de un sorprendido Crivelli. Atrás estaba tranquilo, Robledo sobresalía y en el medio discutía mano a mano con los rivales. En el segundo tiempo, el ingreso de Baiardino por un Robledo, que estaba jugando al borde de la expulsión, le dio más movilidad arriba aunque no tenía la profundidad que buscaba. Cuando mejor estaba, llegó el 0-1 y, cinco minutos después, la expulsión de Nieto. Panorama complicado, parecía que sólo Baiardino lo podía torcer. Así fue que a los 42 minutos, Alexis Vega se fue por la derecha, metió un centro bajo y Fergonzi, anticipando en el primer palo, de taco, logró la igualdad. Esto le dio más fervor para ir a buscar el triunfo, pero su confianza lo mató en el final del partido. 

TEMPERLEY: Sin dudas apostó a lastimar por la derecha, por donde Agustín Campana marcaba la diferencia. No extrañó que a un remate de este jugador, Trípodi mandara la pelota al córner con esfuerzo. Baldunciel aparecía poco y Molina directamente fue anulado por los rivales. Un buen córner fue cabeceado por Vivanco, solito, e increíblemente a las manos del arquero. Se fue el primer tiempo más en lucha que fútbol. En la segunda etapa salió algo dormido. Su rival lo arrinconaba aunque con escaso peligro. De repente, Chaca intentó salir jugando. La pelota del lateral llegó a Campana que sacó un misil que se clavó contra el palo derecho de Trípodi. La ventaja sumada a la expulsión de Nieto pintaban un panorama sumamente alentador para la visita. Pero lo mató el exceso de confianza. A los 40 minutos pudo liquidar el asunto cuando Contreras mandó un centro al primer palo y el buen anticipo de Pumpido hizo que la pelota se fuera cerca del palo izquierdo. Un minuto después llegó el 1 a 1 y parecía que moría en empate, pero Toledo le ganó la espalda a Mazur, metió un centro pasado y Contreras definió cruzado para un festejo interminable.