El buen cierre de torneo que había tenido Independiente el certamen pasado, había ilusionado a su gente. La llegada de Pepe Romero era un cambio de aire luego que Berti había sido contratado por Argentinos. Pero los resultados del ex All Boys no fueron los mejores y como solo ganó un partido de ocho, se tuvo que ir. El equipo mostró un poco más de regularidad con Pablo De Muner, y también se notó que fue un conjunto sólido abajo y con poco peso arriba. Así y todo, fue sacando los resultados necesarios para no perder la categoría, a pesar de algunos tropezones en el camino. No estuvo ni cerca de meterse en el Reducido cuando media categoría pugnaba por ello, pero al menos conservó su sitial por una temporada más.