En la tarde del miercoles, en el estadio “Miguel Morales”, Douglas Haig igualó 0 a 0 con Banfield en la continuidad de la decimoséptima fecha de la Primera B Nacional. El equipo dirigido técnicamente por Marcelo Grioni realizó un planteo inteligente y contó con las situaciones más claras para convertir; sólo le faltó la puntada final.

En el arranque del partido Banfield se apoderó de la circulación de la pelota, pero a pesar de contar con el viento a su favor, no tuvo profundidad. Por su parte, Douglas Haig fue mucho más práctico, seguro defensivamente y tratando de ser punzante en cada ocasión que generaba. A los 9 minutos el rojinegro contó con la primera chance de gol. Tras un pelotazo largo que surgió desde la zona defensiva, Defrancesco bajó el balón, habilitó a Romero adentro del área y el enlace rojinegro sacó un fuerte remate bajo que fue contenido en dos tiempos por Bologna.

Pasados los 15 minutos de partido Banfield empezó a perder la pelota, Douglas Haig comenzó a ganar terreno y el equipo del Sur del Gran Buenos Aires se fue quedando sin ideas en la ofensiva. Tanto es así, que la única vía de ataque a la que recurrió el conjunto de Almeyda fue el remate desde media distancia. A los 19´ Yeri probó desde afuera pero el disparo se fue muy desviado.

Douglas Haig tampoco tuvo claridad cuando contó con la posibilidad de desnivelar, pero preocupó a la defensa rival con los movimientos de Defrancesco y las intermitentes apariciones de Mazza. A los 33´ “Pablito” también utilizó el recurso del remate desde media distancia y otra vez encontró bien parado a Bologna, que mandó el balón al tiro de esquina.

Sobre el final de este período, con un Banfield que no le encontraba respuesta al buen planteo de Douglas Haig, debido a que le cortó todos los circuitos futbolísticos al taladro, el equipo de Almeyda tuvo una inmejorable oportunidad para quebrar la paridad. De un despeje aéreo Noir peinó el balón y Salcedo quedó de frente al arco y ante la presencia de un adelantado Emiliano Olivero. El delantero eligió el remate por arriba del portero de Douglas Haig, pero el disparo se fue muy alto.

 

En la etapa complementaria, y con el viento a su favor, Douglas Haig fue más incisivo en la ofensiva. En el inicio de esta segunda mitad Romero, de buena labor, exigió a la figura del encuentro Bologna con un disparo desde la puerta del área grande. Esa no fue la única vez que el enganche local gravitó, ya que a los 6´, habilitó a Quintana que había pasado al ataque y cara a cara con el portero, optó por el remate bajo. El disparo fue despejado por el arquero visitante.

Al notar que su equipo no estaba rindiendo en el nivel que esperaba, Almeyda mandó al campo de juego a Bertolo y el volante fue importante en la generación de fútbol del taladro. A los 9´, una vez más Mazza eligió el remate desde afuera del área y nuevamente Bologna se hizo con el esférico.

A partir de los 25 minutos Douglas Haig equivocó los caminos en búsqueda del triunfo y comenzó a perder la posesión del juego paulatinamente. Banfield también creció considerablemente con el ingreso de Requena y el aporte de Domingo en el mediocampo y a los 31´, el anteriormente mencionado desperdició una buena posibilidad. El volante se encontró con el balón en el área de Douglas Haig y de frente a Olivero, pero su remate con la pierna izquierda se fue muy desviado.

Y cerca de que se cumpla el tiempo reglamentario, Mazza vio la tarjeta roja en el equipo de Pergamino. El delantero, que había sido amonestado minutos antes, tocó el balón con la mano en un ataque y el árbitro Carlos Maglio decidió sacarle la segunda amarilla y la roja. En el cierre, Yeri remató adentro del área y el balón se fue cerca del travesaño del arco defendido por Olivero.

A pesar de haber enfrentado al puntero del campeonato, Douglas Haig jamás especuló con el resultado y tuvo la iniciativa en todo momento. A veces pecó por imprecisiones y en otras oportunidades por virtudes del rival, pero está claro que el conjunto de Marcelo Grioni transita por el camino correcto y que jugando de la manera que lo hizo ayer serán más los puntos que el equipo sumará, que los que dejará escapar.