LA CLAVE: El segundo gol terminó por enterrar cualquier intento de reacción de Atlas.

REAL PILAR: Le llevó diez minutos imponer condiciones. Apareció Ríos para meter un pase para Arricau, éste eludió a Grieger y Pardo rechazó al corner. Lo ejecutó Ríos, peinó Arricau y corrigió Crego por el segundo palo para poner el 1 a 0. Mientras su rival trataba de llevar peligro, Lucas Ríos y Rodríguez Puch intentaban hacer jugar a su equipo. Zafó justo de la igualdad y, a los 25 minutos, Ríos puso una pelota al punto penal y Correa, en su afán por despejar, marcó en contra el 2 a 0. Cuatro minutos después, Rodríguez Puch hizo una jugada maradoniana, enganchó del medio hacia la izquierda, eludió a tres rivales y remató cruzado para poner el 3 a 0 y cerrar la cancha. Siguió con su toqueteo habitual y la visita empezó a contestar con violencia. En el segundo tiempo, en la primera que tuvo, Rodríguez Puch sacó un remate rasante que se metió contra el palo izquierdo de Grieger, que solo miró. De ahí hasta el final quedó tiempo para que Gelmini, Arricau y Fernández Colombo se perdieran el quinto gol. Gran partido del Monarca que fue sólido atrás, combativo y con fútbol en el medio y exigente con Arricau arriba.

ATLAS: Arrancó jugando al compás de Mansilla. Eran interesantes las peligrosas trepadas de Kevin González, pero le faltaba pólvora en el área. Con el 0-1, intentó ir por la igualdad. González metió un centro para que Torres González pusiera el 1 a 1, pero la oportuna aparición de Falabella lo impidió. Un minuto después, llegó el infortunado 0-2 y casi se quedó sin reacción. En el medio perdía más seguido. Eso derivó en que recurriera a la pierna fuerte, y no se quedó con 10 porque el árbitro no quiso expulsar a Flores. Sobre el final, Acuña metió una mediavuelta que se fue cerca. En el ST, no tuvo respuestas futbolísticas para ir por el descuento y llegó el 0-4. Los cambios le dieron un poco más de vida y empezó a merodear el área rival. Tuvo un par de situaciones que fueron bien resueltas por Sosa. Pálida imagen del Guerrero.