LA CLAVE: Se sabía que el clima podía invitar a rematar de lejos. Puerto lo hizo y destrabó un partido que hasta ahí era muy aburrido.

DEPORTIVO PARAGUAYO: Trataba de generar en el medio pero se iba prestando la pelota con su rival. En ese contexto no siempre lograba localizar a Pellico y Willian Giménez arriba y, para peor, en la primera de riesgo le convirtieron. En el segundo tiempo, que trató de ser más ofensivo desde los cambios, no tuvo posibilidad de tomar control del partido y lo terminaron noqueando en cinco minutos (anteriormente había zafado en un gol anulado al rival). Contó con una chance para empatar y con otra muy clara para ponerse 1-3. La derrota fue exagerada, pero pagó precio a no poder tapar las posiciones de su rival. El equipo del "Púa" Pizzella necesita urgente hilvanar dos triunfos al hilo para tener alguna chance de colarse en el Reducido, que en esta categoría da posibilidades generosas.

PUERTO NUEVO: No fue una maravilla pero sí tuvo efectividad. Lo más saliente del triunfo fue haberlo conseguido con varias bajas de relieve sobre el equipo de memoria que ganó el Apertura. Sin Balbuena, Huarte, Lojda, Moreno y Samaniego en el once inicial, encontró igual un resultado contundente. Rodrigo Martínez fue el más desequilibrante, con la pelota y rematando. Ojeda por derecha hizo el trabajo de siempre, y Redondo y Meza acompañaron bien. En su solvencia defensiva (lleva solo 8 goles en contra en 14 partidos) descansa el portuario de cara a dos choques fundamentales como ante Cambaceres y Sportivo Barracas.