No se supo controlar y se complicó solo
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No se supo controlar y se complicó solo

Racing empató en un gol con Estudiantes de San Luis. Siendo más, se puso en ventaja con un golazo de Alexis Canario. En el arranque del segundo tiempo le empataron por un penal, muy discutido por los jugadores, que se terminaron desequilibrando emocionalmente. Enseguida, Julio Ibañez agredió a un rival y dejó al Chaira con uno menos. Más tarde expulsaron a Enzo Suárez. Con dos más, el tibio equipo puntano fue a buscar la victoria pero no generó chances claras. Flojísimo arbitraje del bahiense Bruno Bocca que perjudicó a ambos. (Foto: Ola Fútbol)

Por Ola Fútbol de Olavarria

Qué cambiante es el fútbol. Durante 50 minutos, Racing fue más que el timorato Estudiantes de San Luis y sin brillar, se puso arriba en el marcador y justificó la ventaja con su ambición para ir a buscar.

Pero la sanción de un penal a los 7’ST le costó caro y transformó al equipo en un manojo de nervios por un rato. El claro agarrón a Nicolás Gatto fue observado por el bahiense Bruno Bocca y no dudó en marcar la pena máxima. Seis jugadores de Racing se le fueron encima, tres recibieron amarilla y el ambiente se enrareció.

Hasta ahí, en el primer período, con el gran trabajo de Blanco, el aporte de la habilidad de Ramírez y el lío que hizo Canario (se resintió de la molestia muscular y salió en el descanso) cada vez que recibió la pelota cerca del área, el Chaira ejerció una leve superioridad. El rendimiento no fue superlativo ni mucho menos pero le alcanzó para merecer algo más.


El gol de Canario fue una joyita. La inició Ibañez, la recibió Ramírez por izquierda, centro, era despeje de Céliz, el 9 Chaira le acomodó el cuerpo, desacomodó a Herrera con un hamaque y definió abajo.

Después de la pobre tarea defensiva del domingo en Villa Ramallo, Milanese Commisso tomó nota y a los cuatro defensores (como debe ser en este Racing, los laterales no deben pasar la mitad de la cancha, salvo circunstancias especiales), les sumó a Blanco e Ibañez como doble cinco. Al Guante (indudablemente es volante ofensivo) no se lo notó cómodo pero cumplió la orden -incluso en ocasiones estuvo llamativamente detrás de la línea de Milton- y en un par de incursiones ofensivas tuvo influencia positiva. Así, los únicos momentos de inquietud fueron algunas fallas individuales o cuando en una pelota parada a favor, la salida rápida de los puntanos los puso en apuros, que pudieron solucionar.

Pero ese penal (que fue y terminó en el 1-1 tras la ejecución de Moreira Aldana) los movió del eje emocional, no hubo madurez para sobrellevar lo que consideraron una injusticia y la indisciplina de cinco minutos dentro del campo condicionó el desarrollo en los 35’ que faltaron y donde había enormes chances para quedarse con los tres puntos.

Un equipo corto que viene cargado de amarillas, sumó varias más y al ratito, Julio Ibañez no toleró dos faltas consecutivas y agredió a un rival, en una irresponsabilidad que lo dejará al menos dos juegos afuera y con 4 amarillas acumuladas.

Así, Racing le dio vuelo a un híbrido Albiverde de San Luis que sufrió tanto a los puntas de Racing que en el entretiempo movió piezas de manera extraña (el fornido central Céliz fue de lateral y el petiso Llamos fue de la punta a la zaga).

El ‘Indio’ Gallardo y Méndez agarraron más la pelota, Garro encontró lugar para su zurda en la izquierda pero como no había conexión con los de arriba ni convicción para soltar gente e ir a buscar la victoria, no costó demasiado aguantar.

Ya sin Suárez, los nueve quedaron de Racing en los minutos finales corrieron mucho e intentaron la heroica con Ramírez pero era difícil superar a seis.

Como se dio la cosa, el punto sirve. Pero habrá que mirar hacia adentro, revisar comportamientos y encarar el durísimo porvenir. Con reacciones como las adentro y las justificaciones cuestionables de su entrenador afuera, el camino del Chaira va a llenarse de espinas, sin ninguna duda.

Después que pase la bronca y se pueda ser más racional y autocrítico, se entenderá que si ante cada presunto perjuicio se va a perder el juicio, el horizonte será muy, pero muy oscuro. Este miércoles, once contra once, fue más. Después, con casi un tiempo por jugar, se complicó solo.

Ah, no hay que olvidarse del arbitraje de Bruno Bocca. Tuvo una noche para el olvido, justo ante los ojos del examinador de AFA Gustavo Bassi (sentado en la platea techada junto al olavarriense Juan Pablo Pompei). El bahiense está apuntado para ser promovido pero desde el primer tiempo tuvo fallas chicas y de las importantes. 

Bocca acertó en el penal y la roja a Ibañez, pero solamente amonestó a Mamberti (35'PT) por un tackle deslizante desde atrás en una contra de los puntanos; no sancionó dos penales (uno a Rojas para el local, otro a Méndez para la visita), debió expulsar a Erramuspe (estando amonestado derribó en la puerta del área a Garro y fue el autor del penal a Méndez) y tuvo criterio diferente para varias infracciones similares. Terminó con la puerta del vestuario protegida por los policías, mientras jugadores y auxiliares de ambos equipos (sí, los dos quedaron disconformes) se apretujaban para acercarse a hacerle todo tipo de reproches.

RACING (Olavarria) 1: Mocoroa; Santellán, Erramuspe, Suárez y Buongiorno; Bruzzone, Blancoso, Ibañez y Mamberti; Ramírez, Canario (45´ Rojas -81´ Ordozgoiti-). DT: Víctor Milanese Commisso.
SPORTIVO ESTUDIANTES (San Luis) 1: Brasca; Llamos, Céliz, Herrera y Quiroga; Vallejo, Méndez, Gallardo y Garro; Moreira Aldana (70´ Morete), Nicolás Gatto. DT: Gerardo Gómez-Juan Carlos Puente.

Jugado el 12 de febrero
Goles: 18´ Canario y 53´ Vallejo
Expulsado: 56´ Ibañez
Árbitro: Bruno Bocca (Bahía Blanca)
Cancha: Racing