DEPORTIVO ARMENIO: Acusó el golpe de los dos goles recibidos. A partir de ahí arrinconó a Morón, pero un poco por el lógico apuro y otro poco por sus propias imprecisiones, no le hizo demasiado daño a Leguizamón. Muchos centros y llegadas en las que no podía dar el toque final. La más clara la tuvo con un remate de Rojas, que desde inmejorable posición, la tiró a las nubes. Su mayor déficit estuvo en la defensa, más precisamente por el sector izquierdo, donde el Gallo se hizo un festín. Y jugado como estaba en ataque, hasta pudo haber sufrido otro tanto en el primer tiempo. En las segunda mitad volvió a apretar a la visita contra su propia área. Tan es así que Nebot y Casarini eran dos delanteros más. Sin embargo, su rival rápidamente se rearmó y le fue ganando terreno, hasta provocar que su mansa entrega.

DEPORTIVO MORÓN: Se encontró con dos goles de movida y eso le simplificó muchísimo el asunto. No obstante, desnudó muchas de sus limitaciones, y si pudo mantener el cero fue más por la inoperancia de Armenio que por méritos propios. Leguizamón nunca mostró seguridad -sobre todo en los centros- y fue Otermín quien, desde su solidez, le salvó las papas del fuego. Acertó Pasini en los cambios, cuando en el peor momento de Morón en el partido, hizo ingresar a Granero y a Basualdo, quienes le dieron más presencia en el medio e hicieron que los locales retrocedieran varios metros. En los últimos minutos tuvo un par de contras para liquidarlo, pero ya sin la efectividad del primer tiempo, no pudo decorar el resultado con otro gol más.

EL PANTALLAZO

Morón no estuvo solo en el estadio Armenia. Lo acompañaron sus hinchas adentro y afuera. Unos 120 se ubicaron al costado izquierdo de la platea, recibiendo muy bien y gritando con fuerza los dos goles. Enfrente, en la ex visitante, 130 más que fueron llegando con el partido empezado, entre los cuales había varias mujeres y niños. Y afuera, unos 50 más que no pudieron ingresar, pero estuvieron toda la tarde pegados al portón de entrada, e incluso algunos se colgaron del paredón y de los árboles para poder ver mejor el partido. Tras el primer gol, éstos entonaron el clásico "Dale Morón, dale Morón", respondido por el "Dale Armenio, dale Arme´" de los locales. Recién en el final se los volvió a escuchar a los que estaban en la ex visitante, con "Morón (2) te vamos a seguir, adonde quieras ir". Ahí volvieron a acompañar los que estaban en la calle para cargar al local con "Oh no tenés vergüenza, son locales son 50", y en el final todos se unieron con "Morón (2) te sigo a todos lados, siempre descontrolado te quiero ver campeón". La retirada fue a puro grito y festejo, mientras que los locales tuvieron que esperar para salir. Asimismo, de Armenio se hicieron presentes unos 220 hinchas, con tres tirantes y una bandera. Poco aliento, y sólo de un reducido grupo (los que aportaron el colorido), que entonó "Alentemos todos juntos pa´ que pongan huevo nuestro jugadores/ que los partidos se ganan dentro de la cancha y acá en los tablones/ Y vamos Armenio, transpire la camiseta/ y vamos Armenio, que Ingeniero está de fiesta". También se animaron con "El que no salta es de Tigre y de Morón". Sin embargo, lo más jugoso estuvo a cargo de un plateísta que le dedicó varios gritos a los jugadores rivales. Por ejemplo, empezó con "Por eso no crecés, por malo" (a Barbieri), luego siguió con "Eh, Pasini, aparte de viejo boludo, alcahuete; sentáte, tarado" y "Dale semillas de mijo al pájaro loco" (en referencia al particular peinado de Mariano Martínez), hasta terminar con "Entra el pelado de pelo largo", dedicado a Granero. Por supuesto, tampoco faltaron los desubicados gritos de Noray Nakis, quien debería aprender que para ser presidente de un club, también hay que parecerlo, y no insultar como un desaforado al árbitro.

EXCESIVO CONTROL
Por las tranquilas calles de Ingeniero Maschwitz no se puede transitar libremente. Al menos los días que juega Armenio, y que la Policía dispone que el propio club no le puede vender entradas a los simples aficionados al fútbol que tienen ganas de ver un partido. Por eso, un par de móviles y varios uniformados se ubicaron a 300 metros del estadio, justo a la altura de las vías y, armas largas en mano, pararon a todo lo que se movía. A los transeúntes le preguntaban "¿adonde vas?", y si la respuesta era "a la cancha", había que acreditarlo con un carnet (de socio de Armenio o de periodista) y el respectivo DNI. A los automovilistas los hacían detenerse, y los obligaban a todos los ocupantes a descender del vehículo, teniendo que justificar su presencia allí. Y ni siquiera el transporte público se salvó, ya que detenían a los colectivos para preguntarles a los pasajeros hacia donde se dirigían. Una verdadera vergüenza de parte de la Policía, adoptando medidas de épocas ya superadas. La pregunta es ¿cómo hicieron los 250 hinchas de Morón para acercarse a la cancha? 

DEPORTIVO ARMENIO 0: Jara (5);  Cristian Gómez (4)(45´ Lolli 5), Nebot (5)A, Casarini (6)A y Cattáneo (5); Rojas (6)A, Sebastián López (5), Marcelo Benítez (5)(45´ Tabak 5) y Peralta (5)A(75´ Paz); Medina (5) y Pacheco (5). DT: Eduardo González. Suplentes: Oviedo, Machado, Espeja y Diego Sosa
DEPORTIVO MORÓN 2: Leguizamón (5)A; Giambuzzi (6), Otermín (6)A, Mayola (6) y Orihuela (5)A; Sánchez (6)(61´ Basualdo 6), Parentini (6)(61´ Granero 6), Zuñiga (5)A y Barbieri (6); Mariano Martínez (5)(72´ Gerardo Martínez) y Akerman (7). DT: Pasini. Suplentes: Zalazar, Juárez, Ferreyra y Vaccaría

Jugado el 27 de abril
Goles: 4´ y 13´ Akerman
Cancha: Deportivo Armenio (buena)
Árbitro: Bermúdez (4) Después del segundo gol de Morón, inclinó la cancha alevosamente a favor de Armenio
Público: 470
Resultado Moral: Deportivo Armenio 1 - Deportivo Morón 2