LA CLAVE: La falta de ideas y de  juego por parte de los dos equipos  para poder romper el cero en el marcador.

GENERAL LAMADRID: Sin una idea clara de juego, se podría decir que Lamadrid fue un tanto superior a su rival en cuanto a posesión de balón y a intentar crear ocasiones de gol (por más que no haya tenido una clara) en el primer tiempo. No pudo generar un buen juego de pelota, no lograban concretar varios pases seguidos sin forzar un pelotazo y no pudieron generar una siituación de gol más que un centro raso, el cual cruzó todo el área rival sin que nadie llegue a empujar la pelota. En el segundo tiempo Lamadrid comenzó a jugar mejor. En el primer minuto de juego Nahuel  Torres arrancó por la banda izquierda y enganchando para el centro sacó un disparo que se fue desviado por muy poco sobre el segundo palo. Y luego, 4 minutos después,  tuvo su segunda llegada con “peligro”, por así decirlo: esta vino de un centro el cual quiso rechazar un defensor de Liniers  quien le pifió al balón y que terminó pegando contra el travesaño. Después de estas dos ocasiones, el árbitro expulsó a Maciel por doble amarilla. Igual,  siguió controlando el balón.

LINIERS: Tanto en el primer tiempo como en el segundo, Liniers fue inferior a su rival, ya que no pudo tener un manejo del balón, y cuando lo lograba siempre terminaba en un pelotazos hacia sus delanteros, los cuales estuvieron bien controlado por la defensa rival. Durante el primer tiempo no logró generar ninguna ocasión de gol ni poder plasmar alguna idea de juego. En el complemento, si bien siguió teniendo los mismos inconvenientes que en el primero, no supo aprovechar el hombre de más que tuvo en el campo de juego debido que a los 5 minutos de  quedar con superioridad numérica, Santiago Szerdi  pegó una patada que le valió la roja., A partir de ahí, lastimó poco y nada.