Clásico descontrolado y empatado
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Clásico descontrolado y empatado

Los Andes y Temperley terminaron entre empujones y discusiones un partido donde cada uno tuvo su rato de dominio. El escándalo llegó luego de la expulsión de Cristian Quiñones. (Foto: Agencia HEVA)

Por Sebastián Crosta

LA CLAVE: El lavado de cabeza de De la Riva en el entretiempo, vital para inyectarle más actitud a un equipo que perdía cómodo en dicho ítem. Gracias a eso y no tanto a fútbol, empató el clásico y salvó el invicto.

QUE HICIERON: Los Andes: Con su habitual línea de tres pasándola mal en todo momento por los punzantes avances del visitante, más un Gagliardo que con los pies jugó con suficiencia y esto le costó hasta la jugada del gol rival, no tuvo del medio para adelante el argumento para equilibrar eso. Con la entrada de Blanco y jugando con tres puntas, tuvo más presencia que no siempre es lo mismo que profundidad. Pero le alcanzó para empatarlo con un golazo de Noriega y casi lo gana si Blanco no se enredaba cerca del arco. Como también, mal parado, casi lo pierde.

Temperley: No salió a esperar y lo de Brandán y Luis López fue óptimo, porque se juntaron tanto en la jugada del gol como en otras dos que estuvieron cerca en el PT. En esa etapa era superior por manejo y velocidad, pero en la segunda parte bajó el rendimiento de Unyicio y Giannunzio, perdió el medio, y atrás dejó un poco más de dudas. Un poco se retrasó, lo cual le bajó el perfil protagónico. Para buscar el lado positivo, lleva seis clásicos (justo los seis que se jugaron sin visitantes) invicto en el Gallardón.

EL PANTALLAZO: Gran respuesta, como hace muchísimo tiempo no se veía, del público de Los Andes. Que la gran tribuna ex visitante haya estado a un 80% y con un pulmón mínimo en el corner de las canchas de tenis, lo comprobó. También mucha gente en la tribuna cabecera que da a Boedo, y más de lo normal en el lateral de av Santa Fe. Esto hace un total de 15.000 almas para alentar al Milrayitas, que hicieron retrasar 10´ el arranque del partido por la demanda de entradas y la cola para ingresar.
El recibimiento fue inolvidable con un enorme despliegue de pirotecnia y bengalas (casi se les termina quemando una bandera por la combustión de los papeles), mientras cantaban ¨Ya vas a ver, no somos como los p...de Temperley¨. Aliento constante desde el vamos, aunque el 0-1 causó estupor y empezó la impaciencia, sobre todo con Gagliardo por lo que arriesgaba jugando con los pies. A los 43´ se levantó la popular con ¨Ponelo al negro la p...que te parió¨. Que podía haber algún incidente se olfateaba, ya que los 100 de la visita celebraron el gol de Brandán con mucho fervor y de enfrente los advirtieron con el ¨Olele olala vinieron para Lomas no sé como se van¨.
En la segunda parte el aliento fue más sostenido por la reacción del equipo, el empate fue, en la platea, tan celebrado por los locales como dedicado a los visitantes y allí volaron los primeros objetos revoleados a ese sector. El griterío se hizo carne en el ¨Este es el año Los Andes, no le falles a tu hinchada...¨ y no faltó ¨A estos p...le tenemos que ganar¨. En la pelea entre jugadores se desencadenó el problema mayor de una noche donde el comportamiento venía siendo bueno (de hecho en la popular no hubo ni un inconveniente). Alguien tuvo la brillante idea de desalojar a los allegados de Temperley, que ya estaban recibiendo agresiones desde arriba, antes que termine el partido y teniendo que pasar por una boca de salida que limita con la platea con una modesta reja de por medio. El cordón policial fue insuficiente y tampoco ayudó la adrenalina demostrada desde ambas partes, porque una señora que fue la segunda en salir desde la tribuna de los del Cele se fue haciendo un inequívoco gesto de ¨cagones¨ con sus manos y los que vinieron atrás ligaron todo tipo de monedazos, encendedores, vasitos con orín y algunas cosas más tratando de ser acertadas en sus humanidades. Pero no hubo heridos. La popular local despidió a ellos con ¨El que no salta abandonó¨.
Es hora que alguien entienda que la gente visitante no puede salir por ahí y que lo mejor sería habilitar un egreso alternativo, ya sea por las canchas de tenis o por el colegio lindero, que pertenece al club, porque no es la primera vez que pasa.
Ya reanudado el partido, el fastidio ganó a todos porque después de diez minutos de parate, Lamolina apenas hizo jugar 30 segundos más. Los Andes se fue aplaudido.

LOS ANDES 1: Gagliardo (5); E.Martínez (5), Franco (4)A y Segovia (5); Barale (5), Lorefice (6), Zeballos (5)(45´ Blanco 5A) y Vicente (5); Belforte (4)(65´ Soriano); Vera (6)(77´ M.García) y Noriega (6). DT: De la Riva. Supl: Barros, Mbombaj, Bravo y Bevacqua

TEMPERLEY 1: Crivelli (6)A; Ramos (5), Cucco (6), Aguirre (5) y Quiñones (5); Brandán (6)(61´ Sambueza 5), Unyicio (5), Gianunzio (5)A y Di Lorenzo (5); Herrera (5)(67´ Jara) y L.López (7)(88´ Corado). DT: Biggeri. Supl: De Bórtoli, Del Castillo, Demaldé y Bolatti

(jugado el 20/10) Goles: 18´ Brandán y 66´ Noriega Exp: 92´ Quiñones Cancha: Los Andes (muy buena) Arb: Lamolina (5) Publ: 15.000 Moral: 1 a 1